viernes, abril 20, 2012

Diego Rivera, veracruzano


En la segunda década del siglo XX, cuando México terminaba la larga dictadura de Porfirio Díaz y se sumergía en la guerra revolucionaria, el joven Diego Maria de la Concepción Nepumoceno Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez -Diego Rivera- partió al viejo mundo, como se le ha denominado a Europa. Una beca del gobernador porfirista de Veracruz, Teodoro A. Dehesa, le permitió el viaje y la estancia. Rivera se vio inmerso en las vanguardias del arte europeo. Participó en el surgimiento del cubismo. Hizo allí gran parte de su obra de caballete, poco conocida en México. Retribuyó a Veracruz la beca que recibió mediante la donación de parte de su obra. Así se constituye esta colección de treinta y siete piezas que nuevamente se muestran en la Pinacoteca que lleva el nombre del celebre pintor guanajuatense. Después, Diego pintaría los monumentales murales que adornan y narran la historia mexicana en el Palacio Nacional, el edificio de la Secretaría de Educación Pública y otros recintos.


Arcuell

En sus paisajes nos muestra Veracruz, el Valle de México y Europa.

Pico de Orizaba

Mixcoac

Montparnasse
Pintó a sus mujeres.

Angelina Belof
Lupe Marín
Y pintó a otras mujeres.




Y siguió pintando. Su obra es un acervo que enaltece al pueblo de México.






Y con música jarocha se abrió hoy esta exposición que muestra un poco de la obra de Diego Rivera.







1 comentario:

daniel cruz dijo...

gracias Elionai por la interesante nota y apunte